Henry James 
Los papeles de Aspern 

Henry James no se parecía a ningún escritor americano o inglés, su libros difícilmente se insertarlo en una tradición literaria conocida. Fue necesario que después de su muerte pasaran treinta años para que se produjera su reconocimiento. Hacia el centenario de su nacimiento, 1943, la aceptación de que se trataba de un clásico y de un innovador excepcional era ya casi unánime.

Über den Autor

Henry James nació el 15 de abril de 1843 en Nueva York, hijo del teólogo Henry James Sr., uno de los más importantes intelectuales de la época, quien estuvo en contacto con notables filósofos y escritores, quienes pudieron haber influido profundamente en Henry y sus hermanos.

En 1864, después de varios intentos por estudiar Ciencias y Derecho, Henry James decidió convertirse en escritor. Era un voraz lector que se encontraba inmerso en las literaturas francesa, inglesa, rusa y la clásica norteamericana. Comenzó haciendo algunas críticas de libros y presentó sus trabajos a varias revistas, hasta que, en 1871, The Atlantic Monthly publicó, por entregas, su primera novela: Guarda y tutela.

Fue también a principios de esta década que recorrió morosamente Italia, Francia e Inglaterra, donde se quedó a residir en 1876. Las obras que siguieron a este recorrido se ven fuertemente influenciadas por la cultura europea: Roderick Hudson, El americano. Daisy Miller, Retrato de una dama. Lo que caracteriza su narrativa es el ritmo lento y la descripción sutil de los personajes, más que los propios acontecimientos, y aunque sus tramas no son complicadas, se hacen complejas por los repliegues de la estructura y el estilo indirecto, como en Los papeles de Aspern y
Otra vuelta de tuerca, para muchos, la culminación de su obra. Además, es uno de los precursores indiscutibles del monólogo interior, por la forma en que narra los procesos mentales de sus personajes, y el primero en emplear los narradores
múltiples.

Al estallar la Primera Guerra Mundial y observar cómo Estados Unidos reclutaba jóvenes para participar en la contienda, decidió convertirse en ciudadano británico. El siguiente año, 1916, meses después de un derrame cerebral, falleció de neumonía, el 28 de febrero.